En los últimos 3 años se han jubilado más de 15.000 autónomos, de los cuales, unos 3.000
autónomos por año podrían haberse acogido a la jubilación activa para continuar con sus
pequeñas actividades económicas si existiese un verdadero plan de compatibilización atractivo,
que permitiese a aquellos autónomos que quieran mantenerse en activo, cobrar la pensión
completa desde el primer día.
A pesar del escaso fomento de la jubilación activa para los trabajadores autónomos, nuestro
colectivo es el que mayoritariamente se acoge a este tipo de jubilación, representando en la
actualidad más del 90% de la jubilación activa en nuestro país. De los más de 58.000 jubilados
activos del colectivo autónomo, únicamente el 28% cobra íntegramente la pensión.
La propuesta enviada por UPTA al Ministerio de Inclusión hace dos semanas, recogía
precisamente la modificación del artículo 214 del TRLGSS “Pensión de jubilación y
envejecimiento activo” para permitir la compatibilización del 100% del cobro de la pensión
contributiva de jubilación con su trabajo por cuenta propia, tengan o no trabajadores a su cargo.
Esta modificación permitiría la supervivencia de los negocios condenados a su pronta
desaparición, prolongando la vida laboral y fomentando el envejecimiento activo de aquellos
autónomos con actividades micro.
En los próximos años se va a producir una jubilación masiva de autónomos, y mientras la edad
de jubilación sigue aumentando, la propuesta de UPTA supone una solución para el
mantenimiento de aquellas actividades que no son de especial penuria y supondría una
reparación de la falta de políticas de relevo generacional, que son las necesarias para que, la
pensión de jubilación de los más de 1 millón de autónomos que perciben la prestación pueda
ser sostenible en el tiempo.
Eduardo Abad, presidente de UPTA España, añade “seguimos esperando una respuesta del
Ministerio y que se consulte con las dos grandes organizaciones de autónomos (ATA y UPTA), un
asunto tan trascendental como es el de la jubilación de nuestro colectivo.”
“En los próximos años habrá un éxodo hacia la jubilación de miles de trabajadores autónomos,
así como va en aumento el porcentaje de autónomos mayores de 63 años, por lo que estamos
ante la última oportunidad de establecer un sistema de jubilación activa que sea atractivo y
poder frenar el deterioro de nuestro tejido productivo que supone que año tras año cierren miles
de negocios solventes en nuestro país y que tienen un amplio arraigo.”
Abad concluye, “exigimos que la jubilación de miles de autónomos pueda producirse en las
condiciones más dignas posible y poder parar la tomadura de pelo que supone el aumento de la
edad de jubilación sin descanso y que no se activen verdaderas políticas e iniciativas para la
continuidad de miles de actividades económicas.”