Desde UPTA España queremos manifestar nuestra firme posición a favor de la reducción de la jornada laboral a 37,5 horas semanales. Consideramos inadmisible el retraso que se está ocasionando para la aprobación de esta medida, que es fundamental para la modernización y estabilización del mercado laboral. La medida está pensada para ser una reforma estructural, que evolucione las condiciones laborales, sociales y económicas de los trabajadores por cuenta ajena, sin que eso signifique un problema para los empleadores.
Actualmente, la mayoría de los 491.563 autónomos con asalariados a su cargo, que representan el 14% de los autónomos en España, ya aplica jornadas laborales inferiores a las 40 horas y cercanas a las 37,5 horas que propone el Gobierno, por lo que no supondrá un impacto significativo en los pequeños negocios. Según un informe del Ministerio de Trabajo y Economía Social, la jornada media pactada ya se sitúa en 38,37 h semanales en España. Estos datos son en base a 2.405 convenios colectivos que cubren a más de 7,4 millones de personas trabajadoras. En comunidades como el País Vasco (37,16 h), Navarra (37,52 h) y Cataluña (37,56 h), los acuerdos actuales están incluso por debajo del objetivo estatal.
Desde UPTA advertimos que posponer esta reforma, solo beneficia a las grandes corporaciones, que se pueden permitir ofrecer condiciones laborales más atractivas y flexibles. Esta situación deja en clara desventaja a los pequeños negocios, especialmente en sectores como el comercio y la hostelería, donde la alta rotación de personal es una problemática constante. La imposibilidad de ofrecer mejores condiciones impide consolidar plantillas estables, formadas por profesionales comprometidos y cualificados. La dificultad para afianzar equipos es una queja recurrente de autónomos empleadores en estos sectores, que ven cómo esta realidad limita su eficiencia y competitividad.
Consideramos que la medida es necesaria para generar un avance real para la conciliación y la productividad, que mejorará tanto la calidad de vida de las personas trabajadoras por cuenta ajena, como la salud de los pequeños negocios, por lo que, si no se reactivan las negociaciones de manera urgente, UPTA España se unirá de forma activa a las movilizaciones planteadas por UGT.
Eduardo Abad, presidente de UPTA, asegura que, “la jornada de 37,5 h semanales no perjudicará en modo alguno a los pequeños negocios. La mayoría de las personas trabajadoras autónomas con asalariados ya ofrecen jornadas laborales por debajo de las 40 horas. Es falso afirmar que trabajar más horas incremente la productividad. Está ampliamente demostrado que la productividad está directamente relacionada con la mejora de las condiciones laborales, la digitalización de los sistemas productivos y la cualificación de los trabajadores. Quienes niegan esta realidad no están defendiendo la sostenibilidad de los pequeños negocios, sino únicamente los intereses de las grandes empresas que, por cierto, ya aplican jornadas laborales inferiores a las 37,5 horas”.