La afiliación al RETA en Cantabria en el mes de octubre, alcanza los 41.419 trabajadores y
trabajadoras por cuenta propia, lo que supone un leve saldo positivo intermensual de 25
afiliados mas que en septiembre.

Hostelería, que se deja este mes -57 afiliados, y el comercio, -21 (-206 en lo que va de año)
sigue en caída libre y no remonta tras la crisis provocada por la
pandemia de Covid.

Ambos sectores acumulan cuatro meses con pérdidas de afiliación.

Por ello se hace más necesario que nunca tratar de adaptarse a las necesidades del nuevo
consumidor, la digitalización y la formación especializada son las claves para tratar de competir
en un mercado cada vez más exigente.

Por otro lado, detrás de muchos de los cierres que se
están produciendo también está el factor energético y el encarecimiento de los precios, son
miles los pequeños establecimientos que no son capaces de aguantar los costes de producción
y optan por el cierre antes de terminar de arruinarse.

Desde UTAC-UPTA hemos insistido reiteradamente en la conveniencia de establecer un bono
energético para los sectores que más consumo de energía eléctrica necesitan para su
funcionamiento, tanto el Gobierno central como las comunidades autónomas deben poner esta
ayuda en marcha de forma inmediata, de lo contrario seguiremos viendo más carteles de “se
vende” o “se traspasa” en los comercios y locales de pequeña hostelería en nuestras calles.

Eduardo Abad, presidente de UTAC-UPTA, “octubre, que es un mes tradicionalmente malo, ha
aguantado el tirón este 2022, y la afiliación se ha mantenido casi igual que el mes de septiembre,
por lo que podemos esperar un cierre de año positivo en el RETA ante la campaña navideña.

No obstante, y como venimos alertando desde hace meses, el pequeño comercio y la hostelería
están en una situación gravísima, con pérdidas de afiliación muy acusadas, con miles de
comercios cerrando y sin una solución que frene esta auténtica tragedia. La desestructuración
del comercio tradicional es una realidad que está haciendo que las grandes estructuras
económicas atraigan cada día más el consumo de las familias, tanto es así, que en este año han
subido estas ventas en más de un 3%, mientras que los comercios de pequeño tamaño han
perdido casi un 8% de cuota de mercado en los dos últimos años”.